UN PLAN ECONÓMICO MUY EXITOSO
Ríos de tinta (y de “tinta electrónica”) fluyen, calificando de diversos modos al plan económico implementado por el macrismo.
Algunos dicen que fracasó, otros que hubo falta de experticia o directamente que cometieron errores groseros por incapacidad manifiesta, no faltan quienes dicen que “necesitan más tiempo”, e incluso todavía hoy unos pocos insisten en el burdo argumento de “la pesada herencia” para echar culpas al gobierno anterior.
En cambio, me permito afirmar categóricamente que –más allá de muchas marchas y contramarchas, de acciones groseras propias de gerentes omnipotentes y no de políticos consumados, y otras muchas burdas medidas implementadas con torpezas y descuidos manifiestos, cuando no con irresponsables imporvisaciones-, pese a todo eso, cabe decir que ¡el plan de gobierno macrista es demoledoramente exitoso!
Indudablemente es exitoso, pues está logrando todos sus objetivos, y en tiempos récords.
Claramente este gobierno se fijó dos objetivos estratégicos:
De mínima, llevarnos sin escalas a la Argentina semi feudal del siglo XIX, de economía exclusivamente primaria, con la patronal todo poderosa, los obreros de cabezas gachas y sin ningún derecho social ni humano; y la parodia de país resultante, funcionando como colonia dócil del capital extranjero y alineado incondicionalmente bajo la tutela férrea de las Potencias Atlantistas.
De máxima disolvernos como nación, prefabricando media docena o más de dóciles republiquetas bananeras, las más ricas de ellas administradas por regímenes “meritocráticos” fuertemente oligárquicos.
Los objetivos tácticos, en plena ejecución, entre otros, son:
Bajar drásticamente los salarios, jubilaciones y pensiones.
Anular toda la legislación laboral y previsional que sea considerada “inconveniente” a la CEOcracia.
Destruir la industria, sobre todo la de capitales nacionales.
Destruir o anular todos los entes tecnológicos.
Hacer bajar drásticamente los consumos de bienes y servicios, en particular los exportables, sin beneficio para el país y nuestra gente.
Desarticular la integración nacional, frenando obras públicas y no reponiendo infraestructura que se deteriore o dañe severamente.
Utilizar la enorme deuda externa como condicionamiento insalvable, para evitar que resurja Argentina.
Destruir totalmente las fuertes acciones geopolíticas de integración regional, que se habían logrado en años anteriores, en particular la virtual desaparición de la UNASUR y la CELAC, en complicidad manifiesta con otros gobiernos regionales claramente subordinados a las Potencias Atlantistas.
Pisotear adrede la soberanía nacional en todos los frentes, en particular tirando por la borda años de acciones realizadas para la dolorosa causa de Malvinas, amen del abandono expreso de la Antártida Argentina, el Mar Argentino, y el despoblamiento intencional de la Patagonia, para debilitarnos en esa estratégica región.
Avanzar en el manejo del Poder Judicial, para que opere como apéndice de los dictados de los medios concentrados y del Poder Ejecutivo y sus voceros.
A fuerza de carpetazos y/o billeteras, mantener “dóciles” a legisladores, gobernadores y a dirigentes gremiales y empresarios.
Mediante represiones cada vez más similares a las perpetradas en el “proceso”, intimidar o evitar las manifestaciones populares en contra de las draconianas medidas de destrucción nacional que día a día se profundizan.
Claramente, la sumisión total ante el FMI fue un objetivo buscado, para tener como excusa la supuesta inevitabilidad de las medidas de genocidio económico que son las usuales “recomendaciones” de ese ente al servicio del poder financiero transnacional y las potencias asociadas al mismo.
El listado no se agota.
Sin duda alguna, el plan económico del macrismo y sus cómplices políticos, que forma parte esencial del remozado Plan Morgenthau en plena perpetración, hasta hoy demuestra ser “muy exitoso”. Buscaron la destrucción total, y lo están consiguiendo.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
domingo, 30 de septiembre de 2018
miércoles, 26 de septiembre de 2018
THOMAS, DE VIDO Y LA VENDETTA DE LAS PETROLERAS
Contexto.
Entre otros muchos presos políticos de la CEOcracia neoliberal, es interesante analizar las motivaciones encubiertas que con alto índice de certeza seguramente están entre las causales reales de los “linchamientos mediáticos” y de los procedimientos de vejaciones que con claro espíritu de revancha se siguen perpetrando, enfocando en particular los casos de Oscar Thomas y Julio De Vido.
Para evaluar el tema con fundamentación, se requieren conocimientos de Historia Argentina, Energía, Economía y Geopolítica, así sea lo elemental de esta última ciencia.
Antecedentes históricos.
La historia Argentina muestra la ferocidad con la cual los poderes establecidos (el establishment), siempre subordinados a Gran Bretaña y sus socios, se ensañaron con cuantos gobernantes o funcionarios de altos rangos que cometieron las “osadías” de no ser dóciles, de afectar sus intereses, y ¡mucho peor aun! (¡¿?!), realizar claras acciones para sacar a Argentina del subdesarrollo y del rol de colonia dócil de los anglosajones y del poder financiero transnacional.
En su momento, al Ing. Carlos Cassaffousth y el médico y abogado Juan Bialet Massé, constructores del primer Dique San Roque, previa demoledora campaña de terror (que incluso había hecho entrar en pánico a Córdoba, al denunciar falazmente que el dique se estaba desmoronando), los encarcelaron un año, en una clara maniobra de vil venganza por montar una eficiente usina hidroeléctrica que aun hoy, remozada, presta servicios. Además que la presa permitió formar el Lago San Roque, que a su vez permitió el desarrollo de la ciudad turística de Villa Carlos Paz. ¡Pero la gente tiene poca memoria, no suele razonar y desconoce la historia! Por eso, muchos opinólogos de baja estofa, se regodean con los encarcelamientos políticos, y no ven los motivos reales subyacentes!
Entre otros muchos casos (*) Yrigoyen, derrocado, fue preso sin cargos concretos y su modesta casa destruida vandálicamente para buscar lingotes de oro (inexistentes)…pero había cometido “el delito” de crear YPF, que con Mosconi y Baldrich molestó mucho a las dos petroleras anglosajonas. Era el comienzo de la década infame (1930-1943).
Frondizi, derrocado, fue preso por largo tiempo sin cargos concretos. Había logrado el autoabastecimiento petrolero, por primera vez en la historia, favoreciendo nuestra Balanza de Pagos y afectando intereses de los importadores de combustibles. Además había implementado un plan de desarrollo, lo cual siempre molesta a los anglosajones y a los oligarcas locales.
María Estela Martínez de Perón, derrocada, fue presa sin cargos, por mucho tiempo. Había nacionalizado las bocas de expendio de naftas y lubricantes, terminando una operatoria financiera montada para favorecer a Shell y Esso.
Julio Carlos González, Secretario Legal y Técnico de Perón y M.E.M. de Perón, y artífice intelectual de la nacionalización de las estaciones de servicio, fue preso político durante todo el infame proceso.
El dirigente de Luz y Fuerza Oscar Smith, luego de haberle dicho a Videla que se opondría a los planes de Martínez De Hoz en el Sector Eléctrico (claramente perjudiciales para los Intereses Nacionales), fue secuestrado a las pocas cuadras de salir de la Casa Rosada. Es uno de los tantos “desaparecidos” (asesinados clandestinamente) del infame “proceso” cívico militar de 1976. Poco después Martínez De Hoz, directivo de la Ítalo y Ministro de Economía con el golpista Videla, concretó la compra por parte del Estado, de esa empresa generadora, a un valor muy por encima del real de sus vetustos activos; y luego sobrevendrían más negociados en contra de los Intereses Nacionales, en el mismo rubro energético.
No debe soslayarse que es una constante que los gobiernos liberales que nos impusieron a los argentinos (por las vías de golpes de Estado cívico – militares, por fraudes institucionalizados, o por engaños masivos con las presiones mediáticas) siempre han mostrado una gran “afinidad” con los intereses de las petroleras y gasíferas anglosajonas –en el macrismo directamente en el poder por medio de Aranguren y otros personeros de perfiles más bajos-; y por ello evidenciaron una total subordinación a los poderosos intereses relacionados con la generación termoeléctrica, la cual tiene al gas natural y al petróleo como insumos principales.
La “entente cordial” de liberales con petroleras – gasíferas anglosajonas, y sus asociadas las generadoras termoeléctricas, ha sido excluyentemente feroz contra toda alternativa de producción de electricidad que pudiera ser competencia molesta a las usinas devoradoras de hidrocarburos.
Por eso, con diversas artimañas de la más baja estofa, los gobiernos liberales que hemos padecido desde fines del siglo XIX hasta hoy, han impedido o demorado, o atacado arteramente a las usinas hidroeléctricas (usando ampliamente incluso acciones de desprestigio mediante sucias maniobras de difamaciones masivas). Sucede que las hidroeléctricas, con sus bajísimos costos de generación, nula contaminación y muy largas vidas útiles, son competencias insalvables para la costosa generación termoeléctrica.
En la segunda mitad del siglo XX, la energía nuclear pasó a ser otra de las tecnologías de generación eléctrica fuertemente atacada por los poderosos intereses vinculados con la generación termoeléctrica, el petróleo y el gas; sumándose a los violentos difamadores las ONGs ultra ecologistas transnacionales (básicamente británicas), las que con generosas billeteras y muy aceitadas campañas publicitarias lograron engatusar a muchos jóvenes “progres” –muchos de ellos odiadores seriales- de escasas capacidades de razonamiento y bajos niveles de conocimientos en la temática energética.
“Atrevimientos imperdonables” de Thomas y De Vido.
En el contexto previamente descripto, sólidamente fundamentado pero totalmente desconocido e incluso indescifrable para el común de la gente, se pueden entender con meridiana claridad que los encarcelamientos perpetrados contra Thomas, De Vido y algunos de sus colaboradores directos, como el Ing. Baratta, tienen el claro perfil de “vendettas” de los poderosos intereses relacionados a la generación termoeléctrica, y sus vinculados intereses más poderosos aun, de las petroleras y gasíferas transnacionales anglosajonas, más sus asociados menores locales.
Durante su prolongada gestión como Ministro de Planificación, Julio De Vido, junto con Oscar Thomas como Director Ejecutivo del Ente Binacional Yacyretá, impulsaron activamente la exitosa terminación de la hidroeléctrica binacional Yacyretá, obra largamente paralizada adrede y por inoperancia manifiesta, de los precedentes gobiernos de orientaciones claramente neoliberales.
La finalización de Yacyretá significó un cuantioso ahorro de combustibles fósiles y consecuentes ahorros de divisas y ambientales, al generar a plena capacidad, aumentándose la Potencia Disponible, y consecuentemente la
Generación Anual, en aproximadamente 40 %, sustituyéndose a la cara y muy contaminante generación termoeléctrica.
Además, se cortó de cuajo la intención que “bajo el poncho” tenían preparados los sectores vinculados a la generación termoeléctrica, con sus nuevos asociados del terrorismo ecologista, para difamar a Yacyretá, y con ello a todas las hidroeléctricas, ante la supuesta “imposibilidad” de terminar la obra, y con ello acelerar los deterioros de las turbinas que eran consecuencia de sus usos indebidos, por debajo del nivel operativo para el cual fueron diseñadas. Esa utilización con un pelo de agua (nivel de embalse) varios metros de menos, provocaba el fenómeno de cavitación, el cual destruye aceleradamente los álabes (paletas) de las turbinas.
Son de recordar las múltiples campañas de difamaciones, que las ONGs ultra ecologistas, así como fanáticos y mercenarios del ultra ecologismo, durante años perpetraron contra la Central Hidroeléctrica Yacyretá, todas esas campañas demostradamente falaces y maliciosas.
Entre esas campañas, las “denuncias” de derrames subterráneos al Iberá –demostradamente falsas-; las campañas según las cuales nos llenaríamos de plagas y pestes –que no ocurrieron, y en cambio mejoró el nivel de vida de la población en sus entornos, por caso terminando con el cíclico problema de las inundaciones, además del salto cualitativo de nuestro entorno transformando positivamente nuestras ciudades-; y la delirante “denuncia” de un ingeniero agrónomo (¿qué puede saber de estructuras de cemento armado???) y activista del ecologismo cavernario, que afirmó demencialmente que la gigantesca obra estaba cercana al colapso, personaje complicado que después de esa impresentable actitud se llamó al silencio total.
Pero Thomas y De Vido iban mucho más allá en sus “atrevimientos” perjudiciales a los cerrados intereses de las usinas termoeléctricas, pues en base a los conocimientos, experiencia y planteles profesionales de Yacyretá, se estaba trabajando para concretar la Central Añá Cuá (en el vertedero de la central), además de los grandes proyectos de Garabí, Panambí y Corpus, los que de concretarse convertirán a Misiones y norte de Corrientes en el mayor polo de generación hidroeléctrica de Argentina, en sociedades con Paraguay y Brasil.
Más aun, la gestión de Thomas había cambiado el enfoque regional de Yacyretá, pues de una simple mega central hidroeléctrica, había pasado a ser el gran polo inductor del desarrollo de su contexto, siguiendo en eso el positivo ejemplo que Brasil implementó en Itaipú, en Itá y otras grandes hidroeléctricas, que con ese enfoque se integraron positiva y fuertemente a sus entornos.
Pruebas de ellos son las grandes costaneras construidas en Posadas, Encarnación y otras localidades cercanas: la activación del tren de pasajeros que vincula Garupá y Posadas (Argentina) con Encarnación (Paraguay); las obras de extensiones de redes de agua potable, cloacas y pavimentaciones en las zonas vinculadas; las construcciones de autovías en la Ruta 12 y la Ruta 105, parcialmente concretadas y que estaban en claros avances, frenados con la irrupción neoliberal; centros culturales, etc.
Pero el caso de Julio De Vido es “más grave” aun, pues en su gestión se terminó Atucha 2, central nuclear paralizada por presiones del establishment, durante 22 años; se fortaleció el accionar del Sector Nuclear (CNEA, INVAP y otros entes vinculados, aumentándose el presupuesto en 1.100 %); se reactivo en notable proyecto CAREM, de muy avanzada tecnología de centrales modulares; se planificaron tres grandes centrales nucleares más, dos con asistencia tecnológica y financiera de China, y una de Rusia, la primera de las cuales se había comenzado a construir; se licitaron las dos grandes hidroeléctricas en el Río Santa Cruz, con financiación china; se estaba terminando la Central Carbonífera de Río Turbio, de gran importancia energética y geopolítica; se había acordado con Rusia la financiación de la gran hidroeléctrica Chihuido 1; todos esos proyectos en marcha paralizados por la destructiva gestión neoliberal del macrismo; se interconectaron todas las provincias mediante redes eléctricas de alta tensión; se estaba construyendo el GASNEA (recientemente abortado, con valiosas inversiones abandonadas en la actual gestión); y el listado podría seguir.
Como perlita adicional y no menor, trascendió que De Vido fue un fuerte opositor a la iniciativa del Grupo Macri, durante la presidencia de N. Kirchner, de dar por terminado el viejo y abultado litigio por el Correo Argentino, del que el Grupo Macri pretendía pagar solamente un ínfimo porcentaje de la deuda acumulada. Por ese mismo tema, Macri pretendió autocondonarse la deuda a comienzos de su presidencia, lo cual no pudo hacer por el tremendo escándalo público suscitado al trascender periodísticamente la burda e impresentable iniciativa.
La antigeopolítica macrista.
Los muy favorables acuerdos estratégicos que Argentina había logrado concretar con China y Rusia, fueron de hecho anulados por el accionar del neoliberalismo hoy en el gobierno, el cual nos subordinó totalmente a los dictados de la plutocracia transnacional (lo cual fue refrendado con la sumisión al FMI), mega finanzas que operan asociadas a las Potencias Atlantistas, las cuales alientan y festejan la vuelta de Argentina al corral de las colonias dóciles totalmente subordinadas a sus dictados neocolonialistas.
No es casual que mientras internamente crece el repudio popular al impresentable gobierno neoliberal que nos destruye adrede, el presidente recibe felicitaciones y condecoraciones de los capitostes del poder financiero transnacional, poder que succiona nuestras riquezas al exterior, mientras alienta la destrucción social, política y económica de Argentina.
En ese contexto geopolítico de disolución nacional, no puede sorprender que arrecien los vengativos ataques contra quienes accionaron para sacarnos del subdesarrollo crónico, mediante la concreción de obras de infraestructura de enormes importancias estratégicas, incompatibles con el rol de colonia miserable y dócil a la cual nos llevan a los empujones.
Reflexiones finales.
Los datos expuestos son fehacientes, y las evaluaciones de las motivaciones reales, como sucede en muchos análisis sociales (históricos, económicos, etc.), se pueden fundamentar en conjuntos de evidencias, avaladas por hechos históricos que marcan una línea de continuidad.
El accionar destructivo del actual gobierno nacional, es demostrativo que de mínima nos quieren hacer volver al feudalismo campero del siglo XIX, y de máxima, concretar la desaparición de Argentina, operando una versión remozada y aumentada del siniestro Plan Morgenthau.
De ahí la ferocidad de las persecuciones políticas, las que claramente buscan impedir el fuerte posicionamiento político de CFK, hoy la principal opositora de la CEOcracia neoliberal en el poder; por lo que evidentemente buscan fabricar motivos para encarcelarla, previa denostación de sus ex colaboradores principales.
(*) Este y otros antecedentes, expuestos en el libro “Tormentosa Argentina”, disponible en el blog http://caoenergia.blogspot.com/
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
Contexto.
Entre otros muchos presos políticos de la CEOcracia neoliberal, es interesante analizar las motivaciones encubiertas que con alto índice de certeza seguramente están entre las causales reales de los “linchamientos mediáticos” y de los procedimientos de vejaciones que con claro espíritu de revancha se siguen perpetrando, enfocando en particular los casos de Oscar Thomas y Julio De Vido.
Para evaluar el tema con fundamentación, se requieren conocimientos de Historia Argentina, Energía, Economía y Geopolítica, así sea lo elemental de esta última ciencia.
Antecedentes históricos.
La historia Argentina muestra la ferocidad con la cual los poderes establecidos (el establishment), siempre subordinados a Gran Bretaña y sus socios, se ensañaron con cuantos gobernantes o funcionarios de altos rangos que cometieron las “osadías” de no ser dóciles, de afectar sus intereses, y ¡mucho peor aun! (¡¿?!), realizar claras acciones para sacar a Argentina del subdesarrollo y del rol de colonia dócil de los anglosajones y del poder financiero transnacional.
En su momento, al Ing. Carlos Cassaffousth y el médico y abogado Juan Bialet Massé, constructores del primer Dique San Roque, previa demoledora campaña de terror (que incluso había hecho entrar en pánico a Córdoba, al denunciar falazmente que el dique se estaba desmoronando), los encarcelaron un año, en una clara maniobra de vil venganza por montar una eficiente usina hidroeléctrica que aun hoy, remozada, presta servicios. Además que la presa permitió formar el Lago San Roque, que a su vez permitió el desarrollo de la ciudad turística de Villa Carlos Paz. ¡Pero la gente tiene poca memoria, no suele razonar y desconoce la historia! Por eso, muchos opinólogos de baja estofa, se regodean con los encarcelamientos políticos, y no ven los motivos reales subyacentes!
Entre otros muchos casos (*) Yrigoyen, derrocado, fue preso sin cargos concretos y su modesta casa destruida vandálicamente para buscar lingotes de oro (inexistentes)…pero había cometido “el delito” de crear YPF, que con Mosconi y Baldrich molestó mucho a las dos petroleras anglosajonas. Era el comienzo de la década infame (1930-1943).
Frondizi, derrocado, fue preso por largo tiempo sin cargos concretos. Había logrado el autoabastecimiento petrolero, por primera vez en la historia, favoreciendo nuestra Balanza de Pagos y afectando intereses de los importadores de combustibles. Además había implementado un plan de desarrollo, lo cual siempre molesta a los anglosajones y a los oligarcas locales.
María Estela Martínez de Perón, derrocada, fue presa sin cargos, por mucho tiempo. Había nacionalizado las bocas de expendio de naftas y lubricantes, terminando una operatoria financiera montada para favorecer a Shell y Esso.
Julio Carlos González, Secretario Legal y Técnico de Perón y M.E.M. de Perón, y artífice intelectual de la nacionalización de las estaciones de servicio, fue preso político durante todo el infame proceso.
El dirigente de Luz y Fuerza Oscar Smith, luego de haberle dicho a Videla que se opondría a los planes de Martínez De Hoz en el Sector Eléctrico (claramente perjudiciales para los Intereses Nacionales), fue secuestrado a las pocas cuadras de salir de la Casa Rosada. Es uno de los tantos “desaparecidos” (asesinados clandestinamente) del infame “proceso” cívico militar de 1976. Poco después Martínez De Hoz, directivo de la Ítalo y Ministro de Economía con el golpista Videla, concretó la compra por parte del Estado, de esa empresa generadora, a un valor muy por encima del real de sus vetustos activos; y luego sobrevendrían más negociados en contra de los Intereses Nacionales, en el mismo rubro energético.
No debe soslayarse que es una constante que los gobiernos liberales que nos impusieron a los argentinos (por las vías de golpes de Estado cívico – militares, por fraudes institucionalizados, o por engaños masivos con las presiones mediáticas) siempre han mostrado una gran “afinidad” con los intereses de las petroleras y gasíferas anglosajonas –en el macrismo directamente en el poder por medio de Aranguren y otros personeros de perfiles más bajos-; y por ello evidenciaron una total subordinación a los poderosos intereses relacionados con la generación termoeléctrica, la cual tiene al gas natural y al petróleo como insumos principales.
La “entente cordial” de liberales con petroleras – gasíferas anglosajonas, y sus asociadas las generadoras termoeléctricas, ha sido excluyentemente feroz contra toda alternativa de producción de electricidad que pudiera ser competencia molesta a las usinas devoradoras de hidrocarburos.
Por eso, con diversas artimañas de la más baja estofa, los gobiernos liberales que hemos padecido desde fines del siglo XIX hasta hoy, han impedido o demorado, o atacado arteramente a las usinas hidroeléctricas (usando ampliamente incluso acciones de desprestigio mediante sucias maniobras de difamaciones masivas). Sucede que las hidroeléctricas, con sus bajísimos costos de generación, nula contaminación y muy largas vidas útiles, son competencias insalvables para la costosa generación termoeléctrica.
En la segunda mitad del siglo XX, la energía nuclear pasó a ser otra de las tecnologías de generación eléctrica fuertemente atacada por los poderosos intereses vinculados con la generación termoeléctrica, el petróleo y el gas; sumándose a los violentos difamadores las ONGs ultra ecologistas transnacionales (básicamente británicas), las que con generosas billeteras y muy aceitadas campañas publicitarias lograron engatusar a muchos jóvenes “progres” –muchos de ellos odiadores seriales- de escasas capacidades de razonamiento y bajos niveles de conocimientos en la temática energética.
“Atrevimientos imperdonables” de Thomas y De Vido.
En el contexto previamente descripto, sólidamente fundamentado pero totalmente desconocido e incluso indescifrable para el común de la gente, se pueden entender con meridiana claridad que los encarcelamientos perpetrados contra Thomas, De Vido y algunos de sus colaboradores directos, como el Ing. Baratta, tienen el claro perfil de “vendettas” de los poderosos intereses relacionados a la generación termoeléctrica, y sus vinculados intereses más poderosos aun, de las petroleras y gasíferas transnacionales anglosajonas, más sus asociados menores locales.
Durante su prolongada gestión como Ministro de Planificación, Julio De Vido, junto con Oscar Thomas como Director Ejecutivo del Ente Binacional Yacyretá, impulsaron activamente la exitosa terminación de la hidroeléctrica binacional Yacyretá, obra largamente paralizada adrede y por inoperancia manifiesta, de los precedentes gobiernos de orientaciones claramente neoliberales.
La finalización de Yacyretá significó un cuantioso ahorro de combustibles fósiles y consecuentes ahorros de divisas y ambientales, al generar a plena capacidad, aumentándose la Potencia Disponible, y consecuentemente la
Generación Anual, en aproximadamente 40 %, sustituyéndose a la cara y muy contaminante generación termoeléctrica.
Además, se cortó de cuajo la intención que “bajo el poncho” tenían preparados los sectores vinculados a la generación termoeléctrica, con sus nuevos asociados del terrorismo ecologista, para difamar a Yacyretá, y con ello a todas las hidroeléctricas, ante la supuesta “imposibilidad” de terminar la obra, y con ello acelerar los deterioros de las turbinas que eran consecuencia de sus usos indebidos, por debajo del nivel operativo para el cual fueron diseñadas. Esa utilización con un pelo de agua (nivel de embalse) varios metros de menos, provocaba el fenómeno de cavitación, el cual destruye aceleradamente los álabes (paletas) de las turbinas.
Son de recordar las múltiples campañas de difamaciones, que las ONGs ultra ecologistas, así como fanáticos y mercenarios del ultra ecologismo, durante años perpetraron contra la Central Hidroeléctrica Yacyretá, todas esas campañas demostradamente falaces y maliciosas.
Entre esas campañas, las “denuncias” de derrames subterráneos al Iberá –demostradamente falsas-; las campañas según las cuales nos llenaríamos de plagas y pestes –que no ocurrieron, y en cambio mejoró el nivel de vida de la población en sus entornos, por caso terminando con el cíclico problema de las inundaciones, además del salto cualitativo de nuestro entorno transformando positivamente nuestras ciudades-; y la delirante “denuncia” de un ingeniero agrónomo (¿qué puede saber de estructuras de cemento armado???) y activista del ecologismo cavernario, que afirmó demencialmente que la gigantesca obra estaba cercana al colapso, personaje complicado que después de esa impresentable actitud se llamó al silencio total.
Pero Thomas y De Vido iban mucho más allá en sus “atrevimientos” perjudiciales a los cerrados intereses de las usinas termoeléctricas, pues en base a los conocimientos, experiencia y planteles profesionales de Yacyretá, se estaba trabajando para concretar la Central Añá Cuá (en el vertedero de la central), además de los grandes proyectos de Garabí, Panambí y Corpus, los que de concretarse convertirán a Misiones y norte de Corrientes en el mayor polo de generación hidroeléctrica de Argentina, en sociedades con Paraguay y Brasil.
Más aun, la gestión de Thomas había cambiado el enfoque regional de Yacyretá, pues de una simple mega central hidroeléctrica, había pasado a ser el gran polo inductor del desarrollo de su contexto, siguiendo en eso el positivo ejemplo que Brasil implementó en Itaipú, en Itá y otras grandes hidroeléctricas, que con ese enfoque se integraron positiva y fuertemente a sus entornos.
Pruebas de ellos son las grandes costaneras construidas en Posadas, Encarnación y otras localidades cercanas: la activación del tren de pasajeros que vincula Garupá y Posadas (Argentina) con Encarnación (Paraguay); las obras de extensiones de redes de agua potable, cloacas y pavimentaciones en las zonas vinculadas; las construcciones de autovías en la Ruta 12 y la Ruta 105, parcialmente concretadas y que estaban en claros avances, frenados con la irrupción neoliberal; centros culturales, etc.
Pero el caso de Julio De Vido es “más grave” aun, pues en su gestión se terminó Atucha 2, central nuclear paralizada por presiones del establishment, durante 22 años; se fortaleció el accionar del Sector Nuclear (CNEA, INVAP y otros entes vinculados, aumentándose el presupuesto en 1.100 %); se reactivo en notable proyecto CAREM, de muy avanzada tecnología de centrales modulares; se planificaron tres grandes centrales nucleares más, dos con asistencia tecnológica y financiera de China, y una de Rusia, la primera de las cuales se había comenzado a construir; se licitaron las dos grandes hidroeléctricas en el Río Santa Cruz, con financiación china; se estaba terminando la Central Carbonífera de Río Turbio, de gran importancia energética y geopolítica; se había acordado con Rusia la financiación de la gran hidroeléctrica Chihuido 1; todos esos proyectos en marcha paralizados por la destructiva gestión neoliberal del macrismo; se interconectaron todas las provincias mediante redes eléctricas de alta tensión; se estaba construyendo el GASNEA (recientemente abortado, con valiosas inversiones abandonadas en la actual gestión); y el listado podría seguir.
Como perlita adicional y no menor, trascendió que De Vido fue un fuerte opositor a la iniciativa del Grupo Macri, durante la presidencia de N. Kirchner, de dar por terminado el viejo y abultado litigio por el Correo Argentino, del que el Grupo Macri pretendía pagar solamente un ínfimo porcentaje de la deuda acumulada. Por ese mismo tema, Macri pretendió autocondonarse la deuda a comienzos de su presidencia, lo cual no pudo hacer por el tremendo escándalo público suscitado al trascender periodísticamente la burda e impresentable iniciativa.
La antigeopolítica macrista.
Los muy favorables acuerdos estratégicos que Argentina había logrado concretar con China y Rusia, fueron de hecho anulados por el accionar del neoliberalismo hoy en el gobierno, el cual nos subordinó totalmente a los dictados de la plutocracia transnacional (lo cual fue refrendado con la sumisión al FMI), mega finanzas que operan asociadas a las Potencias Atlantistas, las cuales alientan y festejan la vuelta de Argentina al corral de las colonias dóciles totalmente subordinadas a sus dictados neocolonialistas.
No es casual que mientras internamente crece el repudio popular al impresentable gobierno neoliberal que nos destruye adrede, el presidente recibe felicitaciones y condecoraciones de los capitostes del poder financiero transnacional, poder que succiona nuestras riquezas al exterior, mientras alienta la destrucción social, política y económica de Argentina.
En ese contexto geopolítico de disolución nacional, no puede sorprender que arrecien los vengativos ataques contra quienes accionaron para sacarnos del subdesarrollo crónico, mediante la concreción de obras de infraestructura de enormes importancias estratégicas, incompatibles con el rol de colonia miserable y dócil a la cual nos llevan a los empujones.
Reflexiones finales.
Los datos expuestos son fehacientes, y las evaluaciones de las motivaciones reales, como sucede en muchos análisis sociales (históricos, económicos, etc.), se pueden fundamentar en conjuntos de evidencias, avaladas por hechos históricos que marcan una línea de continuidad.
El accionar destructivo del actual gobierno nacional, es demostrativo que de mínima nos quieren hacer volver al feudalismo campero del siglo XIX, y de máxima, concretar la desaparición de Argentina, operando una versión remozada y aumentada del siniestro Plan Morgenthau.
De ahí la ferocidad de las persecuciones políticas, las que claramente buscan impedir el fuerte posicionamiento político de CFK, hoy la principal opositora de la CEOcracia neoliberal en el poder; por lo que evidentemente buscan fabricar motivos para encarcelarla, previa denostación de sus ex colaboradores principales.
(*) Este y otros antecedentes, expuestos en el libro “Tormentosa Argentina”, disponible en el blog http://caoenergia.blogspot.com/
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
viernes, 21 de septiembre de 2018
Posadas, 20
de setiembre de 2017
A LOS RESPETADOS INGENIEROS
FABIÁN RESTELLI, GUILLERMO MALINOW Y
OSCAR NAVARRO
COMITÉ ARGENTINO DE PRESAS
S/D
De mi mayor consideración:
Hace
aproximadamente un mes leí una interesante y sensata opinión, referida a la
importancia del Sector Hidroeléctrico el contexto energético nacional, todo
ello a su vez dentro del mega contexto socio económico nacional.
Valiosa
opinión sin duda, como era esperable al ser un documento emanado de tres
referentes indiscutibles como son ustedes, que acreditan valiosas trayectorias
de décadas dedicadas al desarrollo hidroeléctrico, todo ello sólidamente basado
en conocimientos técnicos y científicos. Pero además del valor innegable del
nuevo aporte técnico efectuado, destaco el coraje cívico, al ser difundido en
uno de los varios diarios electrónicos que claramente operan como los soportes
comunicacionales de los fuertes intereses que pretende imponer al como sea la
pretendida vigencia excluyente de las amañadamente llamadas “energías limpias”
(pues no lo son), o “energías renovables” (concepto tergiversado, pues sin
pizca de “inocencia” se excluyó a las hidroeléctricas de más de 60 MW de Potencia Instalada); detrás de lo cual sin
duda operan otros poderosos intereses no precisamente vinculados con los
Intereses Nacionales.
Vaya
entonces mi apoyo y sincero reconocimiento ante la difusión del documento
citado.
Sin
perjuicio de ello, entiendo necesario enfatizar que en el actual contexto de
neoliberalismo recargado vigente en nuestro país, tal como es una constante en
gobiernos de orientación económica liberal, no puede sorprender que se congelen
o directamente aborten todos los proyectos de generación que compiten
ventajosamente con la generación termoeléctrica (basada en gas natural y
petróleo); básicamente atacándose y denostándose a los proyectos nucleares e
hidroeléctricos.
Por
supuesto que la promoción acentuada (con fuertes presiones mediáticas e incluso
en los sectores académicos) de las energías “renovables sesgadas” (básicamente eólicas y solares, y sesgadas
pues excluye amañadamente a las hidroeléctricas de importancia), no es casual,
dados los evidentes vínculos de las petroleras-gasíferas transnacionales con
los grupos de poder vinculados a esas y otras “energías renovables” .
Debe
destacarse que no es casual que un gobierno neoliberal a ultranza, como el
actual, postergue o incluso aborte irracionalmente a los proyectos
hidroeléctricos y nucleares, pues es bien conocido que los gobiernos liberales
en Argentina han sido funcionales a los intereses de las petroleras y gasíferas
transnacionales, y también de la vinculada generación termoeléctrica, y desde
hace unos años de sus nuevas asociadas, las energías “renovables”, las cuales
por limitaciones técnicas insalvables dependen de centrales tradicionales
–usualmente turbinas de gas- para estabilizar el voltaje y cubrir los múltiples
e imprevisibles baches de generación.
Tampoco
debe soslayarse el claro perjuicio a los Intereses Nacionales, que claramente
será consecuencia de los contratos dolarizados, indexados, y con una insólita
sumatoria de privilegios claramente excesivos o directamente abusivos, que
conforman la política actual de fomento casi al como sea, de las inversiones en
energías eólica y solar, incluso con compra obligatoria para determinados
usuarios, sin importar los costos de la energía a ser comercializada.
También
me permito citar el sesgado rol que se evidenció (y no sorprendió a nadie bien
informado en la temática energética) de los pomposamente autodenominados “8
Exsecretarios de Energía de Argentina”, que liderados por su referente
principal Jorge Lapeña, se dedicaron con ahínco a denostar al gobierno
anterior, y hoy guardan cómplices silencios ante los verdaderos desmanes que
están perpetrándose en estos casi tres años de gobierno neoliberal, en el cual
usufructúan altos cargos seguramente con elevadas retribuciones pecuniarias, y
con el silencio cómplice (como ya lo dije) ante los desmanes tarifarios, las
cancelaciones de obras y el virtual olvido del interior profundo, así como la
marginación expresa de sectores sociales de menores ingresos.
Entiendo
que pese al indudable rol institucional del CAP, esa cruda realidad política no
puede soslayarse, por lo que de alguna manera debe ser tenida en cuenta y de
alguna forma ser expresada, para de ese modo no avalar las groseras
interrupciones o abortamientos de todos los proyectos hidroeléctricos y
nucleares.
Por
otra parte, pese a haber renunciado a mi larga pertenencia como socio del CAP,
motivado ello básicamente por mis actuales limitaciones físicas, quiero
reiterar que en lo espiritual y en lo concreto sigo vinculado a los altos
objetivos de esa institución, por lo que sigo a entera disposición si en algo
pudiera ser útil, desde la distancia física pero total cercanía en los elevados
propósitos del CAP.
Con
el mayor respeto, así como con el sincero profundo aprecio a cada uno de
ustedes y a la institución que es el Comité Argentino de Presas, solicito que
esta breve nota sea comunicada a todos los asociados, a la vez que en la misma
tónica de respeto total, me reservo el derecho de difundirla ampliamente, dados
los gravísimos momentos que está viviendo nuestro país.
Les
saludo con mi mayor consideración, con el afecto y respeto de siempre.
CPN CARLOS
ANDRÉS ORTIZ
MAGISTER EN
GESTIÓN DE LA ENERGÍA
miércoles, 19 de septiembre de 2018
ADOCTRINANDO PARA LA DISOLUCIÓN NACIONAL
El objetivo real de este gobierno, es llevarnos al como sea, a aquella Argentina de la segunda mitad del siglo XIX, primaria y subdesarrollada en lo económico; semi feudal en lo social; cerradamente dictatorial en lo político (esto último revestido de formalidades pseudo democráticas, tipo puño de acero con guante de seda); y vuelta al rol de colonia dócil en lo geopolítico.
Incluso peor aun, el objetivo de máxima es claramente completar las “tareas pendientes” de 2001, buscando la balcanización de Argentina en media docena o más de republiquetas débiles y dóciles.
Para lograr sus objetivos usa en primer lugar el engaño, con técnicas a veces sutiles y otras muy burdas, dirigiéndose a la gente como si fuese un amontonamiento de adultos con mentalidad infantil, pues a ese tipo de pensamientos direccionados al conformismo y a la fácil permeabilidad de los engaños, apunta para la manipulación mental masiva.
Busca y seduce a sectores más propensos a ser engañados, como los jóvenes “ni ni” (ni trabajan ni estudian); clasemedieros “que se creen” afines a las oligarquías (también caracterizados como “gorilas pobres”) dentro de los que hay pequeños comerciantes, empleados varios, docentes de escasa cultura general, profesionales diversos con pocos o nulos basamentos políticos (pero que suelen creer que “se las saben todas”), jubilados que se creen todo sin analizar nada, tomando como verdades absolutas todo lo que ven en la TV o escuchan en los diarios, así sean noticias tiradas de los pelos o evidentes operetas montadas a veces en forma burda; “progresías” fuera de foco rápidas para asumir “causas nobles” impulsadas desde los centros del poder financiero mundial (como el ultra ecologismo, el ultra feminismo, el abortismo ultramontano, etc.); además por supuesto de sectores uniformados intoxicados con las cerradas pautas doctrinales de la Escuela de las Américas y similares, los que de hecho perdieron toda noción de soberanía y son ignorantes parciales o en muchos casos totales, en temas básicos como Historia, Economía y Geopolítica, conocimientos reemplazados por montañas de dogmas que para sus cerradas mentes no admiten ningún análisis serio, y nunca son cuestionados.
Esos clasemedieros varios, admiran a las oligarquías sin analizar que están apenas uno o dos escalones por sobre los obreros de overol a los que suelen despreciar, mientras las minorías oligárquicas socarrona o claramente los desprecian tanto a los clase medieros como a los obreros y peones, aunque a veces lo disimulan, pues los sectores astutos de las oligarquías excluyentes saben que necesitan mantener conformes como claque dócil a la voluble clase media.
En ese mar de confusiones nada inocentemente montadas, algunos casos resultan paradigmáticos para reflejar los grados de profundidad de las confusiones instaladas en mucha buena gente. Citemos algunos de esos casos de confusos en grados superlativos.
* Profesionales y egresados universitarios, de orígenes socio económicos medios o medios bajos, que dicen “despreciar al populismo”, pero no son conscientes que pudieron estudiar gracias a la Universidad Pública y Gratuita, instituida por “el gobierno populista” de Perón. Y tampoco entienden que sus años de más claros progresos económicos coincidieron con épocas de gobiernos de orientación nacional y popular…los “populistas” que tanto desprecian.
* Integrantes de Fuerzas de Seguridad, que se salen de la vaina para reprimir ferozmente a obreros, maestros y otros asalariados que el neoliberalismo empuja a la miseria, sin razonar que pasan a ser meros instrumentos de quienes destrozan al país, con lo cual ellos (los represores) también terminan siendo afectados, antes o después, pero no lo razonan.
* Algunos de esos represores, se llegan a jactar de “poner en línea a esos negros revoltosos”, con lo cual parecería que no se miran al espejo, pues muchos de ellos son de tez marcadamente cobriza, lo cual no es malo, pero eso muestra el grado de enredos inyectadas en sus confusas mentes.
* Militares que dicen ser “muy patriotas”, pero avalan la destrucción económica generalizada, la desindustrialización feroz, la desintegración de los entes creadores de tecnología (muchos no tienen ni idea de la importancia estratégica de contar con industria y tecnología de avanzada propias), y llegan a sentirse una casta especial, libre (¿¡!?) de las adversidades en las que se está sumiendo al grueso de nuestra gente; y para peor, siguen encerrados en perimidos dogmas de los años ’70.
* “Progresías” muchas veces de violentas expresiones, que dicen odiar “al capitalismo”, a “los fachos” (apelativo que usan para todo lo que no es “progre” según sus cerradas concepciones), pero terminan siendo dóciles peones para tareas de distracción de los problemas acuciantes y perentorios.
* Cuentapropistas, pequeños y medianos empresarios y gente mayor, que de puro analfabetos políticos apoyan a gobiernos y modelos económicos que claramente perjudican al país y a ellos mismos.
El tema no se agota. Algunos comienzan a reaccionar, otros siguen prefiriendo odiar sin ton ni son.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
El objetivo real de este gobierno, es llevarnos al como sea, a aquella Argentina de la segunda mitad del siglo XIX, primaria y subdesarrollada en lo económico; semi feudal en lo social; cerradamente dictatorial en lo político (esto último revestido de formalidades pseudo democráticas, tipo puño de acero con guante de seda); y vuelta al rol de colonia dócil en lo geopolítico.
Incluso peor aun, el objetivo de máxima es claramente completar las “tareas pendientes” de 2001, buscando la balcanización de Argentina en media docena o más de republiquetas débiles y dóciles.
Para lograr sus objetivos usa en primer lugar el engaño, con técnicas a veces sutiles y otras muy burdas, dirigiéndose a la gente como si fuese un amontonamiento de adultos con mentalidad infantil, pues a ese tipo de pensamientos direccionados al conformismo y a la fácil permeabilidad de los engaños, apunta para la manipulación mental masiva.
Busca y seduce a sectores más propensos a ser engañados, como los jóvenes “ni ni” (ni trabajan ni estudian); clasemedieros “que se creen” afines a las oligarquías (también caracterizados como “gorilas pobres”) dentro de los que hay pequeños comerciantes, empleados varios, docentes de escasa cultura general, profesionales diversos con pocos o nulos basamentos políticos (pero que suelen creer que “se las saben todas”), jubilados que se creen todo sin analizar nada, tomando como verdades absolutas todo lo que ven en la TV o escuchan en los diarios, así sean noticias tiradas de los pelos o evidentes operetas montadas a veces en forma burda; “progresías” fuera de foco rápidas para asumir “causas nobles” impulsadas desde los centros del poder financiero mundial (como el ultra ecologismo, el ultra feminismo, el abortismo ultramontano, etc.); además por supuesto de sectores uniformados intoxicados con las cerradas pautas doctrinales de la Escuela de las Américas y similares, los que de hecho perdieron toda noción de soberanía y son ignorantes parciales o en muchos casos totales, en temas básicos como Historia, Economía y Geopolítica, conocimientos reemplazados por montañas de dogmas que para sus cerradas mentes no admiten ningún análisis serio, y nunca son cuestionados.
Esos clasemedieros varios, admiran a las oligarquías sin analizar que están apenas uno o dos escalones por sobre los obreros de overol a los que suelen despreciar, mientras las minorías oligárquicas socarrona o claramente los desprecian tanto a los clase medieros como a los obreros y peones, aunque a veces lo disimulan, pues los sectores astutos de las oligarquías excluyentes saben que necesitan mantener conformes como claque dócil a la voluble clase media.
En ese mar de confusiones nada inocentemente montadas, algunos casos resultan paradigmáticos para reflejar los grados de profundidad de las confusiones instaladas en mucha buena gente. Citemos algunos de esos casos de confusos en grados superlativos.
* Profesionales y egresados universitarios, de orígenes socio económicos medios o medios bajos, que dicen “despreciar al populismo”, pero no son conscientes que pudieron estudiar gracias a la Universidad Pública y Gratuita, instituida por “el gobierno populista” de Perón. Y tampoco entienden que sus años de más claros progresos económicos coincidieron con épocas de gobiernos de orientación nacional y popular…los “populistas” que tanto desprecian.
* Integrantes de Fuerzas de Seguridad, que se salen de la vaina para reprimir ferozmente a obreros, maestros y otros asalariados que el neoliberalismo empuja a la miseria, sin razonar que pasan a ser meros instrumentos de quienes destrozan al país, con lo cual ellos (los represores) también terminan siendo afectados, antes o después, pero no lo razonan.
* Algunos de esos represores, se llegan a jactar de “poner en línea a esos negros revoltosos”, con lo cual parecería que no se miran al espejo, pues muchos de ellos son de tez marcadamente cobriza, lo cual no es malo, pero eso muestra el grado de enredos inyectadas en sus confusas mentes.
* Militares que dicen ser “muy patriotas”, pero avalan la destrucción económica generalizada, la desindustrialización feroz, la desintegración de los entes creadores de tecnología (muchos no tienen ni idea de la importancia estratégica de contar con industria y tecnología de avanzada propias), y llegan a sentirse una casta especial, libre (¿¡!?) de las adversidades en las que se está sumiendo al grueso de nuestra gente; y para peor, siguen encerrados en perimidos dogmas de los años ’70.
* “Progresías” muchas veces de violentas expresiones, que dicen odiar “al capitalismo”, a “los fachos” (apelativo que usan para todo lo que no es “progre” según sus cerradas concepciones), pero terminan siendo dóciles peones para tareas de distracción de los problemas acuciantes y perentorios.
* Cuentapropistas, pequeños y medianos empresarios y gente mayor, que de puro analfabetos políticos apoyan a gobiernos y modelos económicos que claramente perjudican al país y a ellos mismos.
El tema no se agota. Algunos comienzan a reaccionar, otros siguen prefiriendo odiar sin ton ni son.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
miércoles, 12 de septiembre de 2018
PRESUPUESTO DEL 2019 Y SUS CONSIDERACIONES.
Texto recibido de una estimada amiga, quien me autorizó a modificarlo y difundirlo; lo cual hago seguidamente.
Es con relación a “la gobernabilidad” y el presupuesto 2019. ¿Es acaso obligación moral o cívica aprobarlo, así como muchos de arco pseudo opositor (u opositores “perdonables”, como dijo “El Turco” Asís), en estos casi tres años les votaron casi todas las leyes, con las que nos endeudaron, desindustrializaron, destruyeron o desguazaron todos los proyectos y entes tecnológicos, pisotearon nuestra soberanía en forma harto vergonzosa, destruyeron con alevosía miles de puestos de trabajo y precarizaron todos los que pudieron, aumentaron la pobreza en forma escandalosa, redujeron sensiblemente el poder adquisitivo de salarios, jubilaciones y pensiones, implementan tarifazos alevosos y la dolarización total de nuestra economía, y nos llevan a los empujones a la disolución nacional?
Ante esa suma de desmanes…¿puede aceptarse que muchos, seguramente a fuerza de presiones y carpetazos, les votaron todo o casi todo, siendo corresponsables de los desmanes perpetrados. Y esos corresponsables no son solo los “radicales” subsumidos en “Cambiemos”, asumidos como nuevos llegados al ultra conservadurismo neoliberal (o tal vez simplemente puestos en evidencia, en posturas antinacionales ya asumidas mucho antes). No, no son solo ellos. Están los “peronistas perdonables” que de peronistas ya no tienen nada; los ex desarrollistas ahora sumados al carro de los mismos que en su momento dificultaron el programa industrialista de Frondizi y lo terminaron echando y encarcelando, sin cargos concretos; los “socialistas” librecambistas al estilo de Justo, y varios más.
En ese contexto, que se lo pretende disfrazar u ocultar con eufemismos, ¿se debe aprobar el presupuesto recesivo acordado por el macrismo con el FMI, que es claramente inductor de un previsible fuerte genocidio económico?
El presupuesto del año pasado se lo votaron y en pocos días modificaron todo. ¿Cómo les van a creer ahora de nuevo, así muestren los papeles? No son confiables. Además si no se vota el presupuesto, pueden usar el del año pasado. Claro, lo que necesitan es dar “confiabilidad política” y comprometer a todo el peronismo (k, no k y “perdonable” o cómplice) en un ajuste brutal, crecimiento cero, e incluso fuerte recesión con caída del PBI.
Ellos se metieron en este desmadre. No consultaron a nadie cuando día a día destruyeron el aparato productivo y el tejido social, para luego firmar el acuerdo con el FMI, sin pasar por el Congreso.
Sabemos que muchos dirán que estamos en el mismo barco, pero cuando el timón lo tiene un peronista, hay salvavidas para todos, no solo para primera clase. No se debe entrar en esta trampa. Si no hay presupuesto, que usen el anterior. La crisis social será menor así, que
con un presupuesto de ajuste con crecimiento cero (que en verdad será recesivo con caída del PBI y fuerte degradación cualitativa).
Y si hay crisis que ellos provocaron, que se hagan cargo. De la crisis saldrá seguramente un escenario con un emergente Nacional y Popular. Eso sí compatriotas y compañeros de la Causa Nacional, no nos hundamos con ellos. Si se aplica lo que tienen planteado está en juego la democracia representativa; pero también está en peligro la Patria Argentina, que la CEOcracia apátrida lleva a la disolución nacional.
Fuerza compatriotas. Tenemos que atrevernos y jugarnos por La Patria y por el Pueblo, oponiéndonos a que continúe la entrega, la destrucción, la miseria intencionalmente provocada, y el saqueo desenfrenado de nuestros recursos. Oposición que no implica violencia, pero debe ser clara en todos los niveles, incluyendo en el Poder Legislativo. Como siempre fue hecho por los auténticos patriotas. Abrazos en la Celeste y Blanca con el Sol en su centro.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Geopolíticos y Económicos
Texto recibido de una estimada amiga, quien me autorizó a modificarlo y difundirlo; lo cual hago seguidamente.
Es con relación a “la gobernabilidad” y el presupuesto 2019. ¿Es acaso obligación moral o cívica aprobarlo, así como muchos de arco pseudo opositor (u opositores “perdonables”, como dijo “El Turco” Asís), en estos casi tres años les votaron casi todas las leyes, con las que nos endeudaron, desindustrializaron, destruyeron o desguazaron todos los proyectos y entes tecnológicos, pisotearon nuestra soberanía en forma harto vergonzosa, destruyeron con alevosía miles de puestos de trabajo y precarizaron todos los que pudieron, aumentaron la pobreza en forma escandalosa, redujeron sensiblemente el poder adquisitivo de salarios, jubilaciones y pensiones, implementan tarifazos alevosos y la dolarización total de nuestra economía, y nos llevan a los empujones a la disolución nacional?
Ante esa suma de desmanes…¿puede aceptarse que muchos, seguramente a fuerza de presiones y carpetazos, les votaron todo o casi todo, siendo corresponsables de los desmanes perpetrados. Y esos corresponsables no son solo los “radicales” subsumidos en “Cambiemos”, asumidos como nuevos llegados al ultra conservadurismo neoliberal (o tal vez simplemente puestos en evidencia, en posturas antinacionales ya asumidas mucho antes). No, no son solo ellos. Están los “peronistas perdonables” que de peronistas ya no tienen nada; los ex desarrollistas ahora sumados al carro de los mismos que en su momento dificultaron el programa industrialista de Frondizi y lo terminaron echando y encarcelando, sin cargos concretos; los “socialistas” librecambistas al estilo de Justo, y varios más.
En ese contexto, que se lo pretende disfrazar u ocultar con eufemismos, ¿se debe aprobar el presupuesto recesivo acordado por el macrismo con el FMI, que es claramente inductor de un previsible fuerte genocidio económico?
El presupuesto del año pasado se lo votaron y en pocos días modificaron todo. ¿Cómo les van a creer ahora de nuevo, así muestren los papeles? No son confiables. Además si no se vota el presupuesto, pueden usar el del año pasado. Claro, lo que necesitan es dar “confiabilidad política” y comprometer a todo el peronismo (k, no k y “perdonable” o cómplice) en un ajuste brutal, crecimiento cero, e incluso fuerte recesión con caída del PBI.
Ellos se metieron en este desmadre. No consultaron a nadie cuando día a día destruyeron el aparato productivo y el tejido social, para luego firmar el acuerdo con el FMI, sin pasar por el Congreso.
Sabemos que muchos dirán que estamos en el mismo barco, pero cuando el timón lo tiene un peronista, hay salvavidas para todos, no solo para primera clase. No se debe entrar en esta trampa. Si no hay presupuesto, que usen el anterior. La crisis social será menor así, que
con un presupuesto de ajuste con crecimiento cero (que en verdad será recesivo con caída del PBI y fuerte degradación cualitativa).
Y si hay crisis que ellos provocaron, que se hagan cargo. De la crisis saldrá seguramente un escenario con un emergente Nacional y Popular. Eso sí compatriotas y compañeros de la Causa Nacional, no nos hundamos con ellos. Si se aplica lo que tienen planteado está en juego la democracia representativa; pero también está en peligro la Patria Argentina, que la CEOcracia apátrida lleva a la disolución nacional.
Fuerza compatriotas. Tenemos que atrevernos y jugarnos por La Patria y por el Pueblo, oponiéndonos a que continúe la entrega, la destrucción, la miseria intencionalmente provocada, y el saqueo desenfrenado de nuestros recursos. Oposición que no implica violencia, pero debe ser clara en todos los niveles, incluyendo en el Poder Legislativo. Como siempre fue hecho por los auténticos patriotas. Abrazos en la Celeste y Blanca con el Sol en su centro.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Geopolíticos y Económicos
domingo, 9 de septiembre de 2018
LA HIPOCRESÍA COMO PROGRAMA DE GOBIERNO
En realidad se debería decir como metodología de gobierno, pero como el actual carece de programa de gobierno concreto y presentable (tiene una sucesión de parches impresentables, con la constante del “si pasa, pasa”, y con el “lo pateamos para adelante”), cabe asimilar la metodología con el inexistente programa de gobierno.
Como la hipocresía (engañar fingiendo posturas o acciones falsas) es el accionar habitual del gobierno CEOcrático neoliberal actual, a poco menos de tres años de detentar el poder, ya se podría recopilar un volumen enciclopédico de falsedades, expresadas con dosis mayúsculas de cinismo (mentiras descaradas), demostrando niveles de perversidad (gozan con el mal que causan) solo asimilables a las peores y más nefastas dictaduras que soportó nuestro país.
Recientemente, en el marco de reuniones preparatorias del G 20, fingiendo convicciones de las que evidencia carecer, y con cara de “seriedad y circunstancias”, Macri con impostada vehemencia, conceptualmente dijo estar contra el endeudamiento, “no se puede gastar más de lo que se recauda”, expresando eso como el justificativo principal a favor de los feroces recortes presupuestarios en implementación.
O sea que intentó justificar las genocidas políticas económicas acentuadas “por imposiciones consensuadas” con el FMI, con la excusa mentirosa de reducir el déficit presupuestario, el mismo que estos CEOcratas apátridas aumentaron desaforadamente.
Varias mentiras muy gruesas insertadas en un par de breves frases dichas en tono pretendidamente “doctoral” paternalista. Seguramente algunas comadres nada pensantes, unos cuantos muy poco instruidos patrioteros de bandera, más varios crédulos inocentones crónicos, podrán tragarse esas falsedades; las cuales siempre son aplaudidas por oligarcas camperos ansiosos de volver a estructuras feudales; así como sin duda serán apoyadas sibilinamente por tecnócratas que se enriquecen a costa del endeudamiento y la destrucción nacional.
Analicemos las gruesas mentiras dichas con el desparpajo habitual en el impresentable empresario contratista multiprocesado puesto a presidente y carente de toda capacidad de estadista.
Se pone como abanderado de combatir el endeudamiento, que supuestamente es causado principalmente por el déficit presupuestario del Estado Nacional. ¡Hipocresía total además de múltiples costados mentirosos! Veamos.
1 – Evitar el endeudamiento.
¿Qué autoridad moral puede tener Macri para ponerse en predicador del no endeudamiento, si precisamente su desmadrado gobierno nos sumió en la mayor deuda externa que nunca antes tuvo Argentina, con el agravante de la inusual rapidez con la que se contrajo, y a tasas y condiciones leoninamente perjudiciales?
¿Qué autoridad moral puede exhibir, si esa brutal deuda externa, que en menos de tres años nos pasó de una desahogada situación de muy baja deuda a estar hoy a las puertas de un nuevo “default” (dicho en criollo, de una nueva cesación de pagos, como en 2001), es responsabilidad directa de su gestión, la cual se niega a modificar en su perversa orientación neoliberal, promotora de la especulación financiera y destructora de la economía productiva?
2 – Omite admitir su directa responsabilidad tanto en la duplicación del déficit primario del presupuesto nacional (el que se calcula considerando ingresos y egresos directos u “operativos” y omite los intereses de la deuda externa), como en los monstruosamente descomunales, prolongados en el tiempo y crecientes déficits del comercio exterior (importamos mucho más que lo que exportamos, como consecuencia directa de la brutal apertura de la economía) a lo que se agrega negativamente la total falta de controles a los movimientos especulativos de capitales financieros, que permiten las fugas masivas de divisas, operatoria que tiene como actores principales a varios de sus ministros y colaboradores directos.
3 – Mezcla maliciosamente el déficit presupuestario primario (el cual se solventa con moneda local, no con divisas), con el déficit del sector externo, el cual es causa y efecto del estrangulamiento por carencia de divisas (dólares), lo cual nos empuja al default, y nos arrojó (intencional y alevosamente) a las garras del FMI, con sus eternas “recetas” recesivas y destructoras de la economía; lo cual es una excusa para imponer recortes presupuestarios draconianos y genocidas.
Además que Macri no evidenció poseer grandes conocimientos ni cultura general acorde al alto cargo que ocupa, ni capacidad para seleccionar ministros y otros colaboradores de reales capacidades; es indudable que la sumisión al FMI es la pretendida excusa perfecta para terminar de destrozar al Estado Argentino, desguazar la economía nacional, precarizar el trabajo, destruir el tejido social nacional; y tal como lo fundamenté en escritos anteriores, provocar los motivos que nos lleven a la disolución nacional.
Si se pretendiera citar todas las mentiras de campaña, las falsas promesas y los rebuscados e hipócritas falsos motivos con los que justificó los desastrosos resultados de su gestión, más impresentables que lo que sus cómplices políticos hubieran querido; deberíamos escribir un abultado libro, si tan solo se los citara sin mayores explicaciones.
Tan solo recordemos algunas de esas mentiras: “la pesada herencia” (muy liviana en realidad), “la reactivación en el segundo semestre” (que nunca llega), “la lluvia de inversiones productivas” (nunca sucedida), “las tormentas externas” (en realidad sucesión de impericias burdas más las lógicas consecuencias de un modelo económico destructivo y genocida), “el Plan Belgrano de grandes obras públicas” (nunca ejecutadas, además de otras muchas frenadas, canceladas o burdamente abortadas)…y el listado sigue como interminable rosario de mentiras y frases lesivamente groseras (como esa de “vamos a dinamitar el Astillero Rio Santiago”, o aquella mentirosa “el carbón chileno es de mejor calidad que el de Río Turbio (es la misma formación geológica).
Si a eso se le agregan las vergonzosas acciones de entrega de soberanía, el panorama es simplemente desastroso, percibiéndose claramente la implementación de la versión renovada y agigantada del siniestro Plan Morgenthau; ante el beneplácito de las apátridas oligarquías, del impresentable accionar de los patrioteros de bandera tan llenos de doctrinas antinacionales y prejuicios mentirosos asumidos como verdades indiscutibles, y de las profundas confusiones de clases medias muy colonizadas mentales, más otros confusos varios.
El casi total cerco mediático, la guerra judicial o politización vergonzosa de parte del Poder Judicial (el lawfare o guerra judicial), las actitudes impresentables de muchos dirigentes sindicales y empresarios, los roles tibios o cómplices de buena parte de los “opositores” complacientes, las profundas confusiones de “progres” fuera de foco, y los sectores de choque que parecen escuadrones de psicópatas en algunas fuerzas de seguridad que demuestran estar ansiosos de reprimir “civilachos”, además del grado de confusión profunda que afecta a muchos uniformados, que se creen “patriotas y liberales”, lo cual es un oxímoron sin coherencia; todo eso y más, forma un panorama general en extremo preocupante, que nos lleva en forma aparentemente irreversible a la disolución nacional.
¿Habrá un nuevo resurgir de Argentina, como en 2002/2003, o el patriotismo auténtico se extinguió definitivamente o es un “rara avis” en nuestro país?
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
En realidad se debería decir como metodología de gobierno, pero como el actual carece de programa de gobierno concreto y presentable (tiene una sucesión de parches impresentables, con la constante del “si pasa, pasa”, y con el “lo pateamos para adelante”), cabe asimilar la metodología con el inexistente programa de gobierno.
Como la hipocresía (engañar fingiendo posturas o acciones falsas) es el accionar habitual del gobierno CEOcrático neoliberal actual, a poco menos de tres años de detentar el poder, ya se podría recopilar un volumen enciclopédico de falsedades, expresadas con dosis mayúsculas de cinismo (mentiras descaradas), demostrando niveles de perversidad (gozan con el mal que causan) solo asimilables a las peores y más nefastas dictaduras que soportó nuestro país.
Recientemente, en el marco de reuniones preparatorias del G 20, fingiendo convicciones de las que evidencia carecer, y con cara de “seriedad y circunstancias”, Macri con impostada vehemencia, conceptualmente dijo estar contra el endeudamiento, “no se puede gastar más de lo que se recauda”, expresando eso como el justificativo principal a favor de los feroces recortes presupuestarios en implementación.
O sea que intentó justificar las genocidas políticas económicas acentuadas “por imposiciones consensuadas” con el FMI, con la excusa mentirosa de reducir el déficit presupuestario, el mismo que estos CEOcratas apátridas aumentaron desaforadamente.
Varias mentiras muy gruesas insertadas en un par de breves frases dichas en tono pretendidamente “doctoral” paternalista. Seguramente algunas comadres nada pensantes, unos cuantos muy poco instruidos patrioteros de bandera, más varios crédulos inocentones crónicos, podrán tragarse esas falsedades; las cuales siempre son aplaudidas por oligarcas camperos ansiosos de volver a estructuras feudales; así como sin duda serán apoyadas sibilinamente por tecnócratas que se enriquecen a costa del endeudamiento y la destrucción nacional.
Analicemos las gruesas mentiras dichas con el desparpajo habitual en el impresentable empresario contratista multiprocesado puesto a presidente y carente de toda capacidad de estadista.
Se pone como abanderado de combatir el endeudamiento, que supuestamente es causado principalmente por el déficit presupuestario del Estado Nacional. ¡Hipocresía total además de múltiples costados mentirosos! Veamos.
1 – Evitar el endeudamiento.
¿Qué autoridad moral puede tener Macri para ponerse en predicador del no endeudamiento, si precisamente su desmadrado gobierno nos sumió en la mayor deuda externa que nunca antes tuvo Argentina, con el agravante de la inusual rapidez con la que se contrajo, y a tasas y condiciones leoninamente perjudiciales?
¿Qué autoridad moral puede exhibir, si esa brutal deuda externa, que en menos de tres años nos pasó de una desahogada situación de muy baja deuda a estar hoy a las puertas de un nuevo “default” (dicho en criollo, de una nueva cesación de pagos, como en 2001), es responsabilidad directa de su gestión, la cual se niega a modificar en su perversa orientación neoliberal, promotora de la especulación financiera y destructora de la economía productiva?
2 – Omite admitir su directa responsabilidad tanto en la duplicación del déficit primario del presupuesto nacional (el que se calcula considerando ingresos y egresos directos u “operativos” y omite los intereses de la deuda externa), como en los monstruosamente descomunales, prolongados en el tiempo y crecientes déficits del comercio exterior (importamos mucho más que lo que exportamos, como consecuencia directa de la brutal apertura de la economía) a lo que se agrega negativamente la total falta de controles a los movimientos especulativos de capitales financieros, que permiten las fugas masivas de divisas, operatoria que tiene como actores principales a varios de sus ministros y colaboradores directos.
3 – Mezcla maliciosamente el déficit presupuestario primario (el cual se solventa con moneda local, no con divisas), con el déficit del sector externo, el cual es causa y efecto del estrangulamiento por carencia de divisas (dólares), lo cual nos empuja al default, y nos arrojó (intencional y alevosamente) a las garras del FMI, con sus eternas “recetas” recesivas y destructoras de la economía; lo cual es una excusa para imponer recortes presupuestarios draconianos y genocidas.
Además que Macri no evidenció poseer grandes conocimientos ni cultura general acorde al alto cargo que ocupa, ni capacidad para seleccionar ministros y otros colaboradores de reales capacidades; es indudable que la sumisión al FMI es la pretendida excusa perfecta para terminar de destrozar al Estado Argentino, desguazar la economía nacional, precarizar el trabajo, destruir el tejido social nacional; y tal como lo fundamenté en escritos anteriores, provocar los motivos que nos lleven a la disolución nacional.
Si se pretendiera citar todas las mentiras de campaña, las falsas promesas y los rebuscados e hipócritas falsos motivos con los que justificó los desastrosos resultados de su gestión, más impresentables que lo que sus cómplices políticos hubieran querido; deberíamos escribir un abultado libro, si tan solo se los citara sin mayores explicaciones.
Tan solo recordemos algunas de esas mentiras: “la pesada herencia” (muy liviana en realidad), “la reactivación en el segundo semestre” (que nunca llega), “la lluvia de inversiones productivas” (nunca sucedida), “las tormentas externas” (en realidad sucesión de impericias burdas más las lógicas consecuencias de un modelo económico destructivo y genocida), “el Plan Belgrano de grandes obras públicas” (nunca ejecutadas, además de otras muchas frenadas, canceladas o burdamente abortadas)…y el listado sigue como interminable rosario de mentiras y frases lesivamente groseras (como esa de “vamos a dinamitar el Astillero Rio Santiago”, o aquella mentirosa “el carbón chileno es de mejor calidad que el de Río Turbio (es la misma formación geológica).
Si a eso se le agregan las vergonzosas acciones de entrega de soberanía, el panorama es simplemente desastroso, percibiéndose claramente la implementación de la versión renovada y agigantada del siniestro Plan Morgenthau; ante el beneplácito de las apátridas oligarquías, del impresentable accionar de los patrioteros de bandera tan llenos de doctrinas antinacionales y prejuicios mentirosos asumidos como verdades indiscutibles, y de las profundas confusiones de clases medias muy colonizadas mentales, más otros confusos varios.
El casi total cerco mediático, la guerra judicial o politización vergonzosa de parte del Poder Judicial (el lawfare o guerra judicial), las actitudes impresentables de muchos dirigentes sindicales y empresarios, los roles tibios o cómplices de buena parte de los “opositores” complacientes, las profundas confusiones de “progres” fuera de foco, y los sectores de choque que parecen escuadrones de psicópatas en algunas fuerzas de seguridad que demuestran estar ansiosos de reprimir “civilachos”, además del grado de confusión profunda que afecta a muchos uniformados, que se creen “patriotas y liberales”, lo cual es un oxímoron sin coherencia; todo eso y más, forma un panorama general en extremo preocupante, que nos lleva en forma aparentemente irreversible a la disolución nacional.
¿Habrá un nuevo resurgir de Argentina, como en 2002/2003, o el patriotismo auténtico se extinguió definitivamente o es un “rara avis” en nuestro país?
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
lunes, 3 de septiembre de 2018
LA MORIBUNDA INDUSTRIA ARGENTINA
El 2 de setiembre se conmemoraba el día de la Industria Argentina.
Es todo un símbolo que en este desastroso año 2018, la fecha haya pasado totalmente desapercibida.
El hecho no es casual, pues el neoliberalismo recargado y furioso, que encarna el hoy maltrecho y desgastado macrismo, es claramente la versión más crudamente expresada del industricidio ejecutado con intencionalidad y alevosía.
Evidentemente, la dureza inusual y la metodología inmisericorde del shock antiindustrial y antitecnológico (del golpe demoledor en todos los frentes a la vez) aplicado a rajatabla, supera a todos los planes precedentes que en diversos momentos históricos buscaron retrotraer a Argentina al perimido e hiper dependiente rol de pasivo proveedor de materias primas con nula industrialización.
Ese modelo de país feudal en lo socio político y meramente primario en lo económico, fue mantenido a rajatabla, casi sin excepciones, por la oligarquía vacuna puesta a gobernar en forma excluyente por el régimen mitrista y sus continuadores, durante más de seis largas décadas, sostenido mediante el fraude electoral, el voto cantado y un rosario casi interminable de violencias institucionales de todo tipo.
Vendría después la década infame (en rigor desde 1930 a 1943), en la cual salvo honrosísimas excepciones, los detentadores del poder competían por alcanzar peores niveles de cipayismo y de sumisión total y explícita a los poderes extranjeros, en particular de Gran Bretaña. Posiblemente el caso más rastrero de sumisión a los designios del vetusto imperio, haya sido el del catamarqueño Guillermo Leguizamón, integrante de la comisión negociadora del infame Pacto Roca – Runciman, de entrega explícita y vil de la soberanía argentina a los designios británicos. Fue nombrado Lord por su sumisión total al imperio, despreciando todo signo de argentinidad.
Vendrían después los genocidas fusiladores de 1955, furiosos retrógrados que buscaron reestablecer el país estancia de estructura clasista y feudal (“el hijo del obrero deberá resignarse a ser obrero”, era el concepto que con más crudeza definió a esos militares liberales anglófilos y a los oligarcas y los personeros de los intereses extranjeros que los usaron como mascarones de proa).
Industricidas viscerales, odiadores de los obreros sindicalizados que caracterizan a las actividades industriales, entre otras cosas “patrióticamente” impidieron que en esos años Mercedes Benz concretara la primera gran inversión de la firma alemana en el exterior, la cual estaba planificada concretarse en Argentina, para producir camiones y ómnibus semipesados. Estando en viaje, las maquinarias se derivaron hacia Brasil, de donde poco tiempo después importaríamos los vehículos de carga que deberían haberse producido acá.
También desarticularon completamente el exitoso proyecto del Pulqui, que nos convertía en el cuarto país del mundo que producía cazas a reacción (junto a EEUU, la URSS y Gran Bretaña.
¡La oligarquía vacuna campera, exultante de felicidad, por “corregir los pecados” de industrializarnos y desarrollar tecnologías propias de avanzada!
No debe obviarse el hecho que todo el arco opositor al peronismo apoyó los fusilamientos y otras tropelías de los milicos liberales pro británicos, incluyendo en ese arco a los socialistas, radicales y otros.
Después, al desarrollar un plan industrialista el desarrollismo de Frondizi, con más aciertos que errores por cierto, el mismo sector ultra conservador con los mismos milicos liberales, se encargaron de complicarle toda la interrumpida presidencia, obligándolo a nombrar al personero del ultra liberalismo Álvaro Alsogaray como Ministro de Economía, para destrozar con saña lo mucho que se había comenzado a desarrollar; y esos mismos sectores terminaron defenestrándolo y encarcelarlo, sin cargos concretos, por pura vengatividad política.
Encarcelamientos, asesinatos y destierros son metodologías vengativas repetitivas de los personeros del liberalismo económico, cuando llegan al poder formal, tal como lo analicé en mi libro “Tormentosa Argentina”.
A mediados de los años ’60, en medio de los tironeos internos del poder, se había conformado un gobierno cívico militar “no convencional”, pues no resultó crudamente volcado al liberalismo, como casi todos los golpes de Estado del siglo XX en Argentina; habiendo demostrado tener componentes claramente nacionales, desarrollistas e industrialistas, con nombres como el General Guglialmelli y el economista Aldo Ferrer como principales referentes de esa heterodoxia económica.
Sin que implique ocultar gruesos errores (como La Noche de los Bastones Largos en la UBA) y otras represiones a universitarios, obreros y militantes nacionales; tampoco puede soslayarse que hubo muy fuertes impulsos al desarrollo tecnológico y a la industrialización.
Se impulsó la producción con destino dual (civil y militar) de vehículos todo terreno livianos, medianos y pesados, del blindado nacional TAM, del avión Pucará, entre otros insumos militares y estratégicos; y a la vez hubo un fuerte desarrollo de otras industrias, como la automotriz, produciéndose desde entonces camiones pesados, y lográndose una integración nacional superior al 90 % en los automotores nacionales. Un notable logro, fue la producción de calculadoras, de diseño nacional, incluyendo en el rubro a la segunda micro calculadora producida en el mundo. Para dar una idea, en esos años Corea del Sur aun no había desarrollado su hoy poderosa industria electrónica, lo que logró con fuertes apoyos del Estado (o sea fuera de los dogmas liberales, siempre engañosos y falaces).
Los apoyos al Plan Nuclear en los gobiernos de Onganía y Levigston fueron los mayores de la historia argentina hasta ese momento, solo superados por el fortísimo impulso dado al desarrollo nuclear nacional desde 2006 hasta 2015, previsible y lastimosamente abortado por el actual gobierno neoliberal.
Pero después del breve segundo gobierno peronista, el poder ultra conservador en lo político y ultra liberal en lo económico; con las “complicidades” implícitas de la provocadora violencia guerrillera que dio excusas para asaltar el poder a los militares liberales (siguiendo el “libreto” dictado por el británico Harry S. Ferns, y muy bien descripto años después por el patriota Dr. Julio C. González); ese sector retrógrado y oligárquico, con la fórmula habitual del “animémonos y vayan”, logró que se perpetre otro golpe de Estado; el cual esta vez demostró estar dispuesto a demoler todas las estructuras económicas que por tercera vez nos habían puesto en el umbral del desarrollo (las dos anteriores en 1955 y 1962).
El siniestro “proceso”, con las FFAA y FFSS operando como tropas de ocupación, dejó el campo despejado para que Martínez De Hoz, sus secuaces y continuadores, instalen a punta de fusil el neoliberalismo en Argentina.
Desguazaron con ferocidad al sector industrial, con la apertura económica, la sobrevaluación del peso, los altísimos costos financieros y la quita de toda herramienta de promoción industrial, además del achicamiento del mercado interno por las bajas de los salarios reales.
Destruyeron ramas enteras de producciones industriales y desincentivaron los desarrollos tecnológicos.
Todo ese desastre socio económico prosiguió en los gobiernos civiles posteriores, excepto unos pocos meses en el gobierno de Alfonsín, conformándose el período que puede calificarse como “la partidocracia cleptocrática”, cuyos peores años fueron los años ’90 (presidencias de Menem y De La Rúa), que nos llevaron de bruces a la crisis terminal de 2001/2002, la cual nos puso al borde de la disolución nacional; de la cual emergimos casi milagrosamente, entre otros motivos gracias al respaldo académico del Plan Fénix, obra del ya citado Ferrer y otros destacados economistas heterodoxos de mentalidad nacional.
En esa década del ’90, las medidas anti industrialistas y anti tecnológicas fueron de una ferocidad desconocida, revestidas de un cinismo a toda prueba para aplicarlas, mientras el sector financiero se hacía el festín, y las oligarquías camperas ganaban a manos llenas indiferentes a la destrucción nacional.
Inesperadamente para los agoreros del pesimismo, la economía y el tejido social argentino se recompusieron rápida y profundamente, al amparo de políticas económicas keynesianas, con el Estado activo, protector del mercado interno y promotor de la industria y la tecnología nacional. Los datos macro económicos y macro sociales prueban acabadamente esta afirmación; respondiendo esos resultados claramente a decisiones políticas, incluso más allá de una coyuntura mundial favorable hasta 2008 y aun a pesar de la gran crisis mundial comenzada en ese año. Renacieron ramas industriales antes extinguidas, se fortalecieron todas las existentes, disminuyó la deuda externa, mejoró sensiblemente la situación social y el PBI se duplicó, entre otros indicadores muy
positivos…cuidadosamente ocultados o falseados por los voceros del neoliberalismo.
Con el actual gobierno, el paquete de medidas fue desde el comienzo claro y contundente, tendiente a destruir las industrias, desguazar entes tecnológicos, desarticular las economías provinciales, concentrar la riqueza en pocas manos, subordinarnos a las Potencias Atlantistas para volvernos de nuevo a ser el patio trasero de EEUU y de Europa Occidental, desarticular la educación pública, la salud y la previsión social, empobrecer a las mayorías, y previsiblemente, fomentar la disolución nacional implementando una versión remozada del siniestro Plan Morgenthau.
En ese brutal contexto, “sobran” la industria y la tecnología nacional, “lujos” que no se puede permitir una vulgar colonia subordinada al mega poder financiero transnacional y las potencias asociadas al mismo.
Y en ese esquema perverso y apátrida, sobramos al menos 20 millones de argentinos.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
El 2 de setiembre se conmemoraba el día de la Industria Argentina.
Es todo un símbolo que en este desastroso año 2018, la fecha haya pasado totalmente desapercibida.
El hecho no es casual, pues el neoliberalismo recargado y furioso, que encarna el hoy maltrecho y desgastado macrismo, es claramente la versión más crudamente expresada del industricidio ejecutado con intencionalidad y alevosía.
Evidentemente, la dureza inusual y la metodología inmisericorde del shock antiindustrial y antitecnológico (del golpe demoledor en todos los frentes a la vez) aplicado a rajatabla, supera a todos los planes precedentes que en diversos momentos históricos buscaron retrotraer a Argentina al perimido e hiper dependiente rol de pasivo proveedor de materias primas con nula industrialización.
Ese modelo de país feudal en lo socio político y meramente primario en lo económico, fue mantenido a rajatabla, casi sin excepciones, por la oligarquía vacuna puesta a gobernar en forma excluyente por el régimen mitrista y sus continuadores, durante más de seis largas décadas, sostenido mediante el fraude electoral, el voto cantado y un rosario casi interminable de violencias institucionales de todo tipo.
Vendría después la década infame (en rigor desde 1930 a 1943), en la cual salvo honrosísimas excepciones, los detentadores del poder competían por alcanzar peores niveles de cipayismo y de sumisión total y explícita a los poderes extranjeros, en particular de Gran Bretaña. Posiblemente el caso más rastrero de sumisión a los designios del vetusto imperio, haya sido el del catamarqueño Guillermo Leguizamón, integrante de la comisión negociadora del infame Pacto Roca – Runciman, de entrega explícita y vil de la soberanía argentina a los designios británicos. Fue nombrado Lord por su sumisión total al imperio, despreciando todo signo de argentinidad.
Vendrían después los genocidas fusiladores de 1955, furiosos retrógrados que buscaron reestablecer el país estancia de estructura clasista y feudal (“el hijo del obrero deberá resignarse a ser obrero”, era el concepto que con más crudeza definió a esos militares liberales anglófilos y a los oligarcas y los personeros de los intereses extranjeros que los usaron como mascarones de proa).
Industricidas viscerales, odiadores de los obreros sindicalizados que caracterizan a las actividades industriales, entre otras cosas “patrióticamente” impidieron que en esos años Mercedes Benz concretara la primera gran inversión de la firma alemana en el exterior, la cual estaba planificada concretarse en Argentina, para producir camiones y ómnibus semipesados. Estando en viaje, las maquinarias se derivaron hacia Brasil, de donde poco tiempo después importaríamos los vehículos de carga que deberían haberse producido acá.
También desarticularon completamente el exitoso proyecto del Pulqui, que nos convertía en el cuarto país del mundo que producía cazas a reacción (junto a EEUU, la URSS y Gran Bretaña.
¡La oligarquía vacuna campera, exultante de felicidad, por “corregir los pecados” de industrializarnos y desarrollar tecnologías propias de avanzada!
No debe obviarse el hecho que todo el arco opositor al peronismo apoyó los fusilamientos y otras tropelías de los milicos liberales pro británicos, incluyendo en ese arco a los socialistas, radicales y otros.
Después, al desarrollar un plan industrialista el desarrollismo de Frondizi, con más aciertos que errores por cierto, el mismo sector ultra conservador con los mismos milicos liberales, se encargaron de complicarle toda la interrumpida presidencia, obligándolo a nombrar al personero del ultra liberalismo Álvaro Alsogaray como Ministro de Economía, para destrozar con saña lo mucho que se había comenzado a desarrollar; y esos mismos sectores terminaron defenestrándolo y encarcelarlo, sin cargos concretos, por pura vengatividad política.
Encarcelamientos, asesinatos y destierros son metodologías vengativas repetitivas de los personeros del liberalismo económico, cuando llegan al poder formal, tal como lo analicé en mi libro “Tormentosa Argentina”.
A mediados de los años ’60, en medio de los tironeos internos del poder, se había conformado un gobierno cívico militar “no convencional”, pues no resultó crudamente volcado al liberalismo, como casi todos los golpes de Estado del siglo XX en Argentina; habiendo demostrado tener componentes claramente nacionales, desarrollistas e industrialistas, con nombres como el General Guglialmelli y el economista Aldo Ferrer como principales referentes de esa heterodoxia económica.
Sin que implique ocultar gruesos errores (como La Noche de los Bastones Largos en la UBA) y otras represiones a universitarios, obreros y militantes nacionales; tampoco puede soslayarse que hubo muy fuertes impulsos al desarrollo tecnológico y a la industrialización.
Se impulsó la producción con destino dual (civil y militar) de vehículos todo terreno livianos, medianos y pesados, del blindado nacional TAM, del avión Pucará, entre otros insumos militares y estratégicos; y a la vez hubo un fuerte desarrollo de otras industrias, como la automotriz, produciéndose desde entonces camiones pesados, y lográndose una integración nacional superior al 90 % en los automotores nacionales. Un notable logro, fue la producción de calculadoras, de diseño nacional, incluyendo en el rubro a la segunda micro calculadora producida en el mundo. Para dar una idea, en esos años Corea del Sur aun no había desarrollado su hoy poderosa industria electrónica, lo que logró con fuertes apoyos del Estado (o sea fuera de los dogmas liberales, siempre engañosos y falaces).
Los apoyos al Plan Nuclear en los gobiernos de Onganía y Levigston fueron los mayores de la historia argentina hasta ese momento, solo superados por el fortísimo impulso dado al desarrollo nuclear nacional desde 2006 hasta 2015, previsible y lastimosamente abortado por el actual gobierno neoliberal.
Pero después del breve segundo gobierno peronista, el poder ultra conservador en lo político y ultra liberal en lo económico; con las “complicidades” implícitas de la provocadora violencia guerrillera que dio excusas para asaltar el poder a los militares liberales (siguiendo el “libreto” dictado por el británico Harry S. Ferns, y muy bien descripto años después por el patriota Dr. Julio C. González); ese sector retrógrado y oligárquico, con la fórmula habitual del “animémonos y vayan”, logró que se perpetre otro golpe de Estado; el cual esta vez demostró estar dispuesto a demoler todas las estructuras económicas que por tercera vez nos habían puesto en el umbral del desarrollo (las dos anteriores en 1955 y 1962).
El siniestro “proceso”, con las FFAA y FFSS operando como tropas de ocupación, dejó el campo despejado para que Martínez De Hoz, sus secuaces y continuadores, instalen a punta de fusil el neoliberalismo en Argentina.
Desguazaron con ferocidad al sector industrial, con la apertura económica, la sobrevaluación del peso, los altísimos costos financieros y la quita de toda herramienta de promoción industrial, además del achicamiento del mercado interno por las bajas de los salarios reales.
Destruyeron ramas enteras de producciones industriales y desincentivaron los desarrollos tecnológicos.
Todo ese desastre socio económico prosiguió en los gobiernos civiles posteriores, excepto unos pocos meses en el gobierno de Alfonsín, conformándose el período que puede calificarse como “la partidocracia cleptocrática”, cuyos peores años fueron los años ’90 (presidencias de Menem y De La Rúa), que nos llevaron de bruces a la crisis terminal de 2001/2002, la cual nos puso al borde de la disolución nacional; de la cual emergimos casi milagrosamente, entre otros motivos gracias al respaldo académico del Plan Fénix, obra del ya citado Ferrer y otros destacados economistas heterodoxos de mentalidad nacional.
En esa década del ’90, las medidas anti industrialistas y anti tecnológicas fueron de una ferocidad desconocida, revestidas de un cinismo a toda prueba para aplicarlas, mientras el sector financiero se hacía el festín, y las oligarquías camperas ganaban a manos llenas indiferentes a la destrucción nacional.
Inesperadamente para los agoreros del pesimismo, la economía y el tejido social argentino se recompusieron rápida y profundamente, al amparo de políticas económicas keynesianas, con el Estado activo, protector del mercado interno y promotor de la industria y la tecnología nacional. Los datos macro económicos y macro sociales prueban acabadamente esta afirmación; respondiendo esos resultados claramente a decisiones políticas, incluso más allá de una coyuntura mundial favorable hasta 2008 y aun a pesar de la gran crisis mundial comenzada en ese año. Renacieron ramas industriales antes extinguidas, se fortalecieron todas las existentes, disminuyó la deuda externa, mejoró sensiblemente la situación social y el PBI se duplicó, entre otros indicadores muy
positivos…cuidadosamente ocultados o falseados por los voceros del neoliberalismo.
Con el actual gobierno, el paquete de medidas fue desde el comienzo claro y contundente, tendiente a destruir las industrias, desguazar entes tecnológicos, desarticular las economías provinciales, concentrar la riqueza en pocas manos, subordinarnos a las Potencias Atlantistas para volvernos de nuevo a ser el patio trasero de EEUU y de Europa Occidental, desarticular la educación pública, la salud y la previsión social, empobrecer a las mayorías, y previsiblemente, fomentar la disolución nacional implementando una versión remozada del siniestro Plan Morgenthau.
En ese brutal contexto, “sobran” la industria y la tecnología nacional, “lujos” que no se puede permitir una vulgar colonia subordinada al mega poder financiero transnacional y las potencias asociadas al mismo.
Y en ese esquema perverso y apátrida, sobramos al menos 20 millones de argentinos.
MGTR. CARLOS ANDRÉS ORTIZ
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
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